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- El otro Dios de la Guerra que visitó Perú
domingo, 28 de octubre de 2012
25 de octubre. Sony preparó el C.C Megaplaza para desplegar un evento majestuoso escultural y delicioso para cualquier gamer, el anunció ya estaba hecho, en todo Latinoamerica se preparaba un casting para poner la voz a un personaje secundario en la nueva entrega del devastador Kratos que responde al nombre de God of War: Ascension.
Era la primera vez donde este sencillo redactor se introducía a profundidad a un acontecimiento como este, ya no era un espectador, ahora vivía a plenitud el espectáculo con otros ojos mientras mi compañero caminaba con toda confianza al lugar citado donde tendríamos una entrevista con un importante personaje.
Nos dirigimos a un pequeño lugar donde nos esperaba un curioso individuo, alguien que a primera vista, pareciera que no gustará de las entrevistas, cuan equivocado estaba, resultó ser todo un caballero, la primera persona importante dentro de Sony que conocía, estoy hablando del inigualable Mark Stanley, Vice Presidente & General Manager para Latin America de Sony Computer Entertainment America
Encontrarse con un individuo tan lleno de gracia y personalidad, solo fue el inicio de una entrevista corta pero con muchas novedades.
Desde la llegada de una versión de PSN (PlayStation Network) a Perú a finales del 2013, las novedades que traerá consigo,el hecho de que Sony este muy interesada en el mercado latinoamericano; la nueva entrega de God of War, saber que la violencia en el juego seguirá presente, la disposición de Sony por el doblaje latinoamericano en sus videojuegos y los rumores acerca de la posible cinta basada en el videojuego fueron los cortos pero intensos temas de conversación que se pudo sostener.
Hacer mención especial a este caballero que resultó ser todo un cofre de secretos, sacarle cualquier tipo de información es todo un reto para quien lo entreviste.
Con pena la entrevista finalizó dejándonos intrigados sobre las novedades que traerá Sony a través de la nueva PSN en Perú y muchas sorpresas que el buen Mark no quiso revelar.


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